Israel cumplirá 26 años desde el asesinato del ex primer ministro Yitzhak Rabin por un extremista judío israelí en una serie de eventos el lunes.
Por la tarde se celebrará una ceremonia anual denominada “Ner Yitzhak” (vela de Yitzhak) en la residencia del presidente Isaac Herzog, con el ministro de Defensa Benny Gantz, el juez de la Corte Suprema Anat Baron, el vicepresidente de la Knesset, Eitan Ginsburg, y otros dignatarios y familiares.
La ceremonia oficial del estado es en el Monte Herzl a las 15:00. Hablarán el presidente Herzog y el primer ministro Naftali Bennet, al igual que Dalia Rabin, hija del ex primer ministro.
La Knesset celebrará una sesión plenaria especial a las 17:00 horas. A la sesión asistirán la jefa de la Corte Suprema Esther Hayut y la familia Rabin, y los oradores incluirán al presidente de la Knesset Mickey Levy, Gantz, Bennett, el ministro de Relaciones Exteriores Yair Lapid, el jefe de la oposición Benjamin Netanyahu, el ministro de Transporte Merav Michaeli y el ministro de Justicia Gideon Sa’ar. .
Los eventos conmemorativos comenzaron el domingo con una ceremonia producida por el Consejo de Programas de Preparación Pre-Ejército Israelí.
Unos 1.000 jóvenes de más de 50 programas premilitares encabezaron una ceremonia el domingo por la mañana por segundo año consecutivo bajo el título “Debate como hermanos”.
La ceremonia abordó la importancia de la unidad nacional y el discurso respetuoso. Los participantes incluyeron al primer ministro Naftali Bennett, Dalia Rabin, el rabino Yaakov Ariel, el profesor Yuli Tamir, el poeta Eliaz Cohen, la ex diputado Tehila Friedman y otros.
“El asesinato de Yitzhak Rabin fue uno de los eventos más formativos y difíciles en nuestras vidas como nación y como estado”, dijo Bennett en la ceremonia. “Como sociedad, aprendimos lo peligrosos que pueden ser la incitación y el odio”.
“Pero también aprendimos otra lección, [que es] el peligro de difamar a poblaciones enteras, y lo dañinos que pueden ser los estereotipos al alejar al otro”, dijo. “La kipá volvió a mi cabeza después del asesinato”, confesó. “En ese momento yo era comandante de una compañía en [la unidad de fuerzas especiales] Maglan y recuerdo las dificultades que sufría la comunidad religiosa sionista. Por eso precisamente me devolví la kippa a la cabeza. Fue mi respuesta personal, y trajo consigo una idea importante: hacer todo lo que esté a mi alcance para acercar a las personas, eliminar barreras y fomentar la unidad. Somos una nación. No son consignas, son nuestra prerrogativa”, concluyó.
Después de la ceremonia, los jóvenes se dirigieron a la plaza Rabin de Tel Aviv y organizaron discusiones grupales.
También el domingo, el ministro de Defensa Benny Gantz (Azul y Blanco) participó en la ceremonia “Recordar en la canción” en Gan Shmuel.
“Rabin, quien provenía del sistema de defensa, vio como líder nacional no solo los desafíos de seguridad sino también la importancia de tender una mano fuerte y segura a los ciudadanos árabes del país”, dijo en la ceremonia.
“Este imperativo moral es especialmente importante hoy, cuando vemos la enfermedad de la violencia”, continuó. “Tenemos la misión de conectar a la comunidad árabe, hacerla parte de nosotros y satisfacer todas sus necesidades“, dijo.
El día oficial de conmemoración es el lunes y la ceremonia estatal se llevará a cabo en el Monte Hertzl en Jerusalén. El jefe de la oposición, Benjamin Netanyahu, anunció que no asistiría, a pesar de que los anteriores jefes de la oposición participaron tradicionalmente en la ceremonia.
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