Obtener un título universitario es una llave que abre puertas en todo el mundo y si es en una de las mejores 100 universidades del mundo mucho mejor.
Ariel Baran es argentino, porteño, del barrio de Belgrano. Estudió el Ciclo Básico común (C.B.C) en 2019 en la Universidad de Buenos Aires, pero siempre tuvo en claro que su futuro estaría en Israel. Es por eso que al terminar el CBC emigró a Israel para estudiar en sus prestigiosas universidades y perseguir su sueño de vivir en el país del cual tanto escucho hablar desde que era chico.
El nivel de hebreo era uno de sus principales desafíos a la hora de cumplir su objetivo de ingresar a estudiar Ciencias de la computación en el renombrado Instituto Tecnológico Technion en Haifa. Planificó junto a sus padres su Alia (emigración a Israel) y como iban a ser sus primeros meses en Israel, pero había algo que no pudo prever. A un mes de haber llegado se desató una pandemia a nivel global que cambió sus planes, pero nunca su energía por perseguir su sueño.
“Llegué y al mes de haber llegado el país se cerró completamente, mis planes se vieron frustrados, pero no mis ganas de perseguir mi sueño en este país donde elegí vivir.” Ariel Baran nos cuenta sobre su camino en Israel que, si bien no fue nada fácil y hubo muchas idas y vueltas, hoy lo define como una gran decisión de vida que lo hizo crecer y transformarse en adulto.
¿Cómo fue tu proceso para tomar la decisión de ir a vivir en Israel?
Hice Taglit en enero de 2018, después me quedé en un programa anual de Masa que se llama “Shnat Hajshara” en donde capacitan jóvenes para el liderazgo no formal en instituciones de la comunidad judía, fuera de Israel.
En ese programa, me convencí de mi deseo de vivir en Israel habiendo entendido todas las oportunidades y beneficios que el estado le ofrece a los olim (inmigrantes). Pero no fue tan fácil. Cuando le conté a mis padres de mi decisión de vivir en Israel, me hicieron ver que quizás era una decisión apresurada y que debía volver a Argentina para probar alla, estudiar, trabajar, ser madrij (líder no formal) y en caso de seguir con la idea de irme, hacerlo.
Cada minuto que pasaba en Israel, mientras estaba en el plan de Masa, me convencía más de que este es el lugar en el mundo en el que quería estar. Sin embargo y siguiendo el consejo de mis padres, volví a Argentina, hice el CBC, fui madrij en mi comunidad Bet El y después hice Alia.
¿En algún momento de ese año en Argentina dudaste si quedarte o hacer Alia?
No, al contrario.
En Israel yo había tenido una charla con el Director de la Mejina (Programa preparatorio para la Universidad), quien nos contó todos los beneficios de apoyo educativo, económico y asistencial que ofrece Israel a los jóvenes Olim. Ahí me convencí definitivamente.
Pero honestamente el año que tomé en Argentina me sirvió mucho. Fue un año donde pude frenar, terminar de comprender lo que estaba por hacer y sobre todo formar un plan de que es lo que quiero hacer una vez que vaya a Israel.
-Bueno, el plan no lo pudiste hacer como lo habías planeado.
Y, no. Llegué a Israel el 29 de enero de 2020 y la primera vez que nos hablaron de algo con Coronavirus fue en febrero de 2020. A mediados de marzo nos dijeron que el virus se estaba poniendo serio y que las clases de hebreo en el Ulpan (Centro de estudios de hebreo para todos los olim) se iban a suspender y que el Kibutz Magan Michael, donde yo estaba, iba a quedar cerrado.
Nos dieron la opción de quedarnos ahí pero no íbamos a poder hacer nada. En ese momento, paradójicamente en Argentina todavía no había llegado el virus e Israel permitía salir, por lo que volver era una opción.
Por suerte terminé decidiendo quedarme en el Kibutz. Había varios aspectos positivos, el Kibutz es un espacio que tiene mucho aire libre, hay israelíes con los cuales interactuar y por sobre todo yo ya había comenzado mi camino y esto era parte del proceso, o al menos la parte que me tocó.
Hice el Ulpan pero de manera muy interrumpida entre presencialidad y zoom. Si bien la pase muy bien en el Kibutz con jóvenes de mi edad de todo el mundo, no pude aprender bien hebreo y eso me condiciono en mi plan inicial para comenzar mis estudios universitarios.
El hebreo y los estudios académicos:
¿En qué sentido la falta de hebreo te condiciono para los estudios académicos?
Vine a Israel con la idea de estudiar ciencias de la computación en el Technion. Cuando comencé a investigar sobre las universidades me dijeron que necesitaba un nivel de hebreo específico que yo no tenía. Además, el Technion es una universidad aún más exigente en cuanto al hebreo.
En ese momento me surgió otra pregunta muy grande. ¿Qué hago voy al ejercito o tramito mi Teudat Ole (certificado de emigrante) para comenzar mis estudios? //Nota de redacción: En Israel el Ejército es obligatorio 3 años para hombres y 2 para mujeres . Algunos olim también tienen la obligación sujeta a sus condiciones de hacerlo. //
Después de pensarlo un tiempo y con la ayuda de mi familia decidí sacar la Teudat Ole para comenzar mis estudios. Entre Shnat y otros programas que había hecho, luego de la secundaria no había estudiado de manera seria y si empezaba el ejército que iban a ser aproximadamente dos años, iba a perder el ritmo de estudio.
¿Cómo fue el inicio de tus estudios académicos?
Falta un poco para eso. Jajajaja. Como te comenté antes de ingresar a la Universidad es necesario hacer la Mejina, un curso de preparación para el ingreso. Sería en términos de la universidad pública de Argentina un “CBC para olim”.
Empecé la Mejina en octubre 2020, la terminé en junio 2021 y en octubre tras haber sido aceptado por la Universidad Hebrea de Jerusalem, comencé a estudiar Matemática con una especialización en Ciencias de la computación.
Ahora bien, en Israel hay algo que se llama el Psicométrico que es un examen que hacen las universidades y cuyo resultado habilita o no a estudiar determinadas carreras. Es una evaluación cognitiva, lógica y de lenguaje. Es realmente difícil, no solo para olim sino también para los israelíes nativos. En mi caso como no tuve el puntaje para ingresar en Ciencias de computación e ingresé en Matemática que es una carrera afín.
La universidad en Argentina y en Israel
Ahora estás estudiando matemática en la Universidad Hebrea de Jerusalem ¿Como es el día de un estudiante en Israel y como es en Argentina?
No estudié una carrera universitaria en Argentina, tan solo hice el C.B.C. Si puedo decir que en Israel van super rápido. Recién comencé hace una semana la carrera y ya tengo decenas de tareas y trabajos prácticos. Los estudiantes se quedan hasta muy tarde en la universidad para cumplir con las tareas.
Eso genera que en Israel la gente estudie más Maestrías o doctorados porque los títulos de grado en comparación con Argentina son más cortos. Por ejemplo, mi carrera que en Argentina serían 6 años, acá son 3.
Por otra parte, el estudiante de la Universidad Hebrea de Jerusalem no busca notas para pasar, busca buenas notas porque se termina dedicando luego a la investigación o a profundizar aún más lo que aprendió. No es solo tener un título, sino hacer algo grande con eso.
Lo que me sucedió en la Universidad de Buenos Aires es que comenzamos el curso siendo un número y a la semana de haber empezado éramos la mitad. Muchos se daban cuenta que no era lo que les gustaba y dejaban. En comparación, alguien que entró a Ciencias de la computación en Israel en la Universidad Hebrea no hay chance de que deje porque se rompió el alma para ingresar.
¿Hay diferencia entre un israelí y un Ole que va para estudiar?
En primer lugar, el Minhal Hastudentim (Centro de estudiantes) te otorga una beca de estudios. Eso no es algo menor, es la posibilidad de estudiar de manera gratuita en una de las mejores universidades del mundo y los israelíes nacidos acá no tienen ese beneficio.
¿Cómo influye el tema del idioma? ¿Hay facilidades en ese sentido para olim?
Como Ole Jadash tener clases académicas en hebreo no es para nada fácil. Una cosa son las clases del Ulpan y otra muy distinta son las clases de hebreo en la Universidad en donde los profesores van muy rápido y en temas muy complejos. Por eso creo que el hebreo es una herramienta fundamental para quienes quieren estudiar en Israel.
Estudiar en hebreo para un Ole es mucho más difícil porque no es tu lengua madre. En mi caso yo fui a escuelas judías pero el hebreo no fue mi prioridad y mi nivel no era el mejor. Pero bueno, lo estoy haciendo….
También quiero decir que cada vez que hablo con israelíes nativos, no pueden creer que hable tan bien. Todos se muestran dispuestos a darme una mano, porque entienden el nivel de dificultad y valoran el hecho de que seas ole y vengas del otro lado del mundo a estudiar.
¿Qué es lo más fácil de estudiar en Israel? ¿Y lo más desafiante?
Nada es lo más fácil jajajajaja. Fuera de broma, no se puede mentir, para un Ole Jadash no importa cuán bueno sea tu hebreo, es difícil.
Lo bueno es que Israel fomenta la Alia y te pagan los estudios para que progreses en tu vida y sea una Klita (absorción) exitosa en la sociedad. Ósea hay redes de apoyo muy grandes, mentores y gente dispuesta a ayudar.
Si venís a estudiar a Israel, es porque quieres algo mas difícil. Las clases son mucho más intensivas, los horarios también y el desafío es más grande.
¿Cuáles son tus consejos para alguien que está pensando en Israel para hacer estudiar un primer título o una Maestría?
La razón por la cual yo hice Aliá, es porque yo sentía que en Argentina todo lo que tenía era porque nací en una familia que me pudo brindar buena educación y me podía dar los lujos que quería, escuela privada y un marco social muy protegido. Eso fue gracias a que mis papas trabajan y me dieron todo.
Cuando yo estaba en la universidad en Argentina, podía ver la diferencia entre los conocimientos que yo tenía y los de quienes fueron a escuelas públicas. La diferencia era muy grande.
En Israel no existe esa diferencia. Todos van a la misma escuela. Nadie entra a la universidad por ningún acomodo, si llegas es porque te esforzaste. Todo se gana a través del esfuerzo y eso es lo que quería para mi.
Toda persona que venga a Israel con muchas ganas de esforzarse por lograr sus objetivos va a tener éxito. Yo no creo en la idea de “me voy a Israel porque es mejor que Argentina y no me gusta Argentina”. Eso me suena muy infantil. Muchos vienen a Israel pensando que todo es una fiesta, que ganas en una moneda fuerte y que las cosas son más fáciles pero no es así. Se requiere mucho esfuerzo.
Yo ahora estoy trabajando en una hamburguesería que estoy ganando 40 NIS la hora. Yo se que es algo momentáneo, no pienso trabajar de esto toda mi vida, pero actualmente me permite mantenerme bien. A futuro pretendo capacitarme y trabajar en algo que me guste y me permita vivir aún mejor.
Como consejo puedo decir que no apresuren la Alia. Las cosas tienen su tiempo. Las palabras de mis padres tenían mucho sentido y me ayudaron a entender que es lo que quería hacer cuando venía.
Creo que la pregunta principal es ¿Porque hago alia?. Cuando respondo eso, ahí es el momento de empezar los trámites.
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